Trombón | Instrumentos Musicales
Siguiendo el orden de grave a agudo, el siguiente instrumentos que encontramos en el quinteto de metales es el trombón.
Este instrumento proviene de la trompeta primitiva, de la que se tiene constancia. Esta existía en algunas partes orientales del mundo, llegando desde China hasta la tumba de Tutankamon, pasando posteriormente por Roma (como imperio), e incluso España hacia el siglo XIII.
Por esta época (Edad Media), la “trompeta grande” se le llamaba «buccina«, convirtiéndose poco a poco en Alemania, con la evolución del lenguaje, a «pousane«. Sin embargo en Italia se llamaría «trombone«, pasando fronteras al resto de países latinos, incluso a Inglaterra. Hay que tener en cuenta que Italia siempre ha sido uno de los principales centros musicales.
Con el tiempo, muchos compositores le han dado diferentes tratamientos, por su versatilidad tímbrica y de efectos. Así pues, no solo sirve para dar potencia a las composiciones, sino que al igual, puede ser frágil y dulce, como se puede escuchar en el «Requiem» de Mozart donde actúa como solita, o por un compositor posterior como Carl Maria von Webber en su «Romanza para Trombón y Piano«.
Al igual que en toda su historia, con la denominación trombón, siguió evolucionando, existiendo otras formas como el trombón soprano, alto, tenor, bajo y contrabajo.
Con la aparición de las válvulas a principios del siglo XVIII, este instrumento pierde prestigio. Sería gracias a giras solistas europeas por parte de Friedrich Belckle y Carl Queisser por las que el trombón volvería a cobrar importancia.
El trombón también posee desde entonces válvulas, pero por la diferencia de sonoridad ha habido una predilección por el trombón de varas. Será en el Romanticismo cuando el trombón tenga una gran importancia en la orquesta sinfónica. Esto se va ver sobre todo en las obras del compositor alemán Richard Wagner, uno de los mayores valedores de la sección de viento metal en la orquesta sinfónica.